Son aquellas clases de palabras (adjetivos) que pueden reemplazar al nombre, siempre y cuando éste haya sido mencionado dentro del hilo del coloquio. En este sentido los adjetivos pronominales cumplen una función anafórica, puesto que reemplazan al nombre o objeto antes mencionado:
En:
- Juan estudió para el examen
- el [loco] estudió para el examen
En:
- Juan salió a la ruta sin seguro, ¡el [petiso] es un imprudente!
En esta última oración, (petiso) [adjetivo pronominal], tiene un antecedente sustantivo (Juan), se trata entónces de un adjetivo con función pronominal anafórica.
A diferencia de los pronombres puros, los adjetivos pronominales poseen una carga semántica, ya que la palabra (adjetivo) que reemplaza al nombre antes mencionado posee significado, es decir que si se busca la entrada de la palabra en cuestión en un diccionario, ésta tendrá una definición como en el caso de cualquier otra palabra, por ejemplo un sustantivo. No así sucede lo mencionado en la siguiente oración:
El pronombre demostrativo deíctico (esto) carece de significado, porque aunque reemplaza un nombre o un objeto presente en el coloquio, de allí su deixis, su carga semántica no está delimitada, es decir que no produce significación alguna salvo por intermedio del objeto al que hace referencia, entonces el oyente no puede definir formalmente su circunscripción.
Por último, el adjetivo pronominal posee un carácter descriptivo que el pronombre puro no posee. Tomando la siguiente definición:
¨El pronombre es la clase de palabra de carácter no descriptivo y de significación ocasional orientada lingüísticamente ya sea por el hilo del discurso o del coloquio¨
Martín Ramos
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